Diferentes estados temporales del caracter humano.
Desde la feminidad inocente y calmada, hasta Lilith efurecida,
para volver a la templanza de Magdalena y la sonrisa de La Gioconda.
Sómos tantos personajes, encerrados en nuestras cambiantes emociones.
¿Quíén soy yo? Más allá de todos los estados mutantes de la experiencia.
Me interesan más las preguntas, que las respuestas.
HYR
HYR
No hay comentarios:
Publicar un comentario